Y es que todo el mundo mata lo que ama. El cobarde con un beso, el valiente con una espada.

lunes, 9 de agosto de 2010

Why do other families go to disneyland and ours not!?



A los recién llegados.


Anoche escuché los ladridos de los perros,

en lugares que no debía escucharlos.

¿Eras tú quien ladraba de forma tan desesperada?



Pensé en aquellos sueños que se desvanecieron poco a poco a lo largo de los años.


Miré a aquella chica,

sus mejillas sonrosadas, su sonrisa;

toda ella tan entusiasmada

con todo por decir

y nada por hacer.


Como un perro callejero que entra a la casa.


Me miraba a mí misma,

años atrás

cuando los sueños tenían una textura.

Se podían tocar.


“No niño, no sabes lo que dices…”



Los ladridos de los perros no cesaron en toda la noche.

La mañana siguiente descubrí

que odiabas a los animales.

No tenías mascotas, ni vecinos…


…ni animales que tuvieran vecinos como mascotas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Que empiezen las apuestas...