Y es que todo el mundo mata lo que ama. El cobarde con un beso, el valiente con una espada.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Sobredósis



Hoy el día está gris…

Darías cualquier cosa por quedarte todo el día bajo las sábanas, pero sabes que no puedes hacerlo… Te quitas de encima una por una de las cobijas, hace frío… Tomas el reloj despertador en tus manos para callarlo de una vez por todas y lo vuelves a dejar en su lugar. Junto a el, está el pequeño frasco de pastillas a las que ya has creado una dependencia bastante importante…

Te incorporas, tomas el vaso con poca agua que dejaste anoche sobre la mesita y coges el frasco con la otra mano… lo observas detenidamente y miras las indicaciones apenas legibles de la etiqueta que intentaste arrancar la última vez…

Te tomas una…

Miras el frasco sin fondo lleno de aquellas malditas píldoras… ¿Cuánto tiempo llevas tomándolas?

[Cuatro o cinco meses, tal vez...]

Intentas leer de nuevo la etiqueta gastada del frasco y es cuando notas que no tiene una fecha de caducidad…

El dolor no tiene fecha de caducidad…

¿Qué pasaría si te tomaras una más? ¿Se acaban más rápido?

Coges otra píldora del frasco y la pones en tu boca todavía pensando si es prudente tomar dos en un día… ya no hay agua en el vaso, pero aun así la tragas con esfuerzo…

Duele un poco…

¿Qué pasaría si tomas unas cuantas más? ¿Dolerá más?

Vacías sobre tu mano casi la mitad del frasco y metes todo el puñado a tu boca…

Tragas…



Efectivamente duele más…

Ahora haces una reflexión y es cuando decides acabar con tu dolor:

Hace cuatro o cinco meses que eres dependiente de tu propio frasco de sufrimiento, tomas una al día por que no quieres dejar de sentirlo, dices que quieres, pero en realidad te sujetas a algo que ya no existe y la única conexión que tienes con eso es el maldito frasco…

Te quejas y dices que quieres parar de hacerlo, que quieres quitarte esa astilla que tienes atorada muy dentro en el pecho, pero no tienes el valor de acabar con ello…

Después de varias horas de estar sentado en la cama en la misma posición que adoptaste después de tragar todas esas pastillas, es cuando decides que es el momento de acabar con todo…

Miras el frasco una vez más y vacías directamente de éste todas las pastillas en tu boca… Corres al baño y llenas el vaso con agua de la llave para ayudarte a tragar.

Bebes,... tragas… Bebes un poco más y sientes que te ahogas con tus lágrimas…

El frasco está vacío ahora…

No te sientes bien… sin embargo el hecho de saber que tuviste el valor de hacerlo te enorgullece… Sabes que el efecto de las pastillas esta vez tardará más tiempo en pasar, pero en cuanto pase ya no quedarán más en el frasco y tu motivo para seguir sufriendo poco a poco se desvanecerá…

Te recuestas en la cama de nuevo y decides que como hoy el día es gris, quizá valga la pena quedarse bajo las cobijas todo el día…

3 comentarios:

  1. wooooow andy me encanto hahahaha pero la verdad el que mame gusta es el de "son las 6 am y te quedaste dormida" woooow no sabes como me gusta hahah espero que sigas publicando mas si porfa pero me dices cuando tengas entradas nuevas
    oye una pregunta
    ¿como te sentiste despues de tomarte todas las pastillas del frasco?
    atto: amanda

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  2. ja... esto es taaan realista...
    atte: mabel

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  3. Es genial... me identifico... grax x seguir escribiendo...

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Que empiezen las apuestas...